La Florida lidera una revolución gastronómica sostenible con impacto nacional
Estudiantes de gastronomía del Liceo Polivalente de la Corporación Municipal de La Florida (Comudef), protagonizaron una revolución culinaria sostenible al recuperar 400 kilos de alimentos frescos de la feria Los Copihues. Con estos productos, que estaban destinados a ser desechados, prepararon recetas saludables y ofrecieron una clase magistral de cocina en el corazón del barrio, bajo la mirada del alcalde de la comuna, Daniel Reyes.
“Este proyecto es un claro ejemplo de cómo la colaboración entre nuestras áreas de educación, salud y comunidad puede generar un impacto real en la calidad de vida de las personas. La creación del Microbanco de Alimentos no solo reduce el desperdicio, sino que también fomenta una cultura de sostenibilidad y alimentación saludable, liderada por nuestros estudiantes. Desde Comudef, estamos comprometidos en impulsar iniciativas como esta, que fortalecen la educación técnica y posicionan a La Florida como un referente en innovación social a nivel nacional”, señaló Juan Antonio Abarca, secretario general de la Corporación Municipal de La Florida.
Todo se basa en la consolidación de un Microbanco de Alimentos en la comuna, una innovadora iniciativa educativa y comunitaria que rescata alimentos en buen estado antes de convertirse en desperdicio. Estos alimentos son clasificados, procesados y utilizados para generar nuevas recetas, fomentando una cadena de valor que promueve la sostenibilidad, la reducción de desperdicios y la educación alimentaria.
“Desde el área de salud, vemos esta iniciativa como una oportunidad única para abordar problemáticas clave como el desperdicio de alimentos y los altos índices de malnutrición por exceso en nuestras comunidades. El Microbanco de Alimentos no solo rescata alimentos, sino que también promueve hábitos de alimentación saludable, con alimentos ricos en fibra y con carbohidratos de buena calidad, con una alimentación consciente, integrando a estudiantes, vecinos y comunidades en este cambio. Es un ejemplo concreto de cómo la salud y la educación pueden trabajar juntas para mejorar la calidad de vida de todos en La Florida,” destacó Alfredo Bravo, director de Salud de la Comudef.
Por su parte, el alcalde de La Florida, Daniel Reyes, destacó la importancia de esta iniciativa: “Sin duda que es maravilloso. La verdad es que cuando hablamos de sostenibilidad y medioambiente, muchas veces la gente lo percibe como algo lejano. El talento de los alumnos y profesores nos ha mostrado cómo, con un trabajo coordinado entre el área de salud, educación y nuestras ferias libres, podemos dar un segundo valor a los alimentos. No solo hablamos de reciclaje o residuos orgánicos; dejamos de hablar de desechos y los convertimos en alimentos. Esto pone en valor a las ferias libres y a nuestra educación técnica, algo que la gente reconoce y valora profundamente. Además, esta política, que nació en La Florida, se replicará a nivel nacional gracias a la Asociación de Ferias Libres, llegando desde Antofagasta hasta Puerto Montt. Es un orgullo que nuestros alumnos hayan impulsado una política pública como esta.”
Ignacio Román, reconocido chef nacional y que llegó como una forma de motivar a los estudiantes del Liceo Polivalente Municipal, también valoró el impacto de la iniciativa: “Me parece muy interesante y entretenida que la Corporación de Salud, en conjunto con la municipalidad, realice una clase de cocina gratuita para la comunidad utilizando alimentos saludables recuperados. Darles una segunda vida a estos alimentos es algo muy valioso, especialmente considerando que en Chile se desperdician entre 3.500 y 3.700 kilos de alimentos provenientes de ferias libres cada año”.
“Personalmente, me complace saber que se está trabajando con jóvenes estudiantes de gastronomía, quienes aportan ideas frescas y creativas. Esto tiene el potencial de convertirse en un modelo de negocio autosustentable, transformando esos alimentos en productos como salsas, pastas y mermeladas. Además, alinea a Chile con prácticas internacionales como las de Europa, donde los supermercados están obligados a evitar el desperdicio y dar una segunda vida a los alimentos”, enfatiza Román.
Práctica innovadora y estratégica
Ximena Aravena, profesional de Innovación y Gestión del Área de Salud de la Comudef, explicó el impacto educativo del Microbanco de Alimentos: “El Banco de Alimentos Frescos se presenta como una práctica educativa innovadora y una apuesta estratégica para promover la salud, con un impacto en tres niveles fundamentales”.
“Primero, permite a los alumnos participar en actividades trascendentales que les dan proyección de vida, algo esencial para los jóvenes. Segundo, les brinda la oportunidad de desarrollar competencias gastronómicas, dándoles ventajas comparativas en el ámbito laboral e impulsándolos a innovar. Y tercero, fomenta habilidades sociales y la conciencia medioambiental. Al participar en este proyecto, los estudiantes no solo aprenden desde la práctica, sino que también revalorizan su entorno y el alimento mismo”, explicó Aravena.
A su turno, Daniela Alvarado, directora de Educación de la Corporación Municipal de La Florida, destacó: “Esta iniciativa refleja el poder transformador de la educación técnica y el compromiso de nuestros estudiantes con un futuro más sostenible. En el Liceo Polivalente, no sólo formamos talentos para la gastronomía, sino que también inculcamos valores como la conciencia ambiental y el respeto por los recursos. Este proyecto, que convierte alimentos destinados al desecho en oportunidades educativas y comunitarias, es un ejemplo de cómo la innovación puede surgir desde las aulas para generar impacto nacional. Nos llena de orgullo liderar un cambio que combina sostenibilidad, educación y equidad desde La Florida”.
Así, La Florida lidera una transformación educativa, ambiental y social que no solo impacta a nivel local, sino que aspira a convertirse en un modelo nacional para la gestión de alimentos y la promoción de la gastronomía sostenible.