Calor a la vista:
Consejos para Controlar la Hipertensión en altas temperaturas
¡El termómetro se dispara y la hipertensión asoma su cabeza aún más que en otras épocas del año! Por eso, estamos aquí con algunos consejos para enfrentar el calor extremo sin que tu presión arterial se vuelva loca.
Por Andrea Larrosa
En primer lugar, hablemos de agua. Nada como ella para mantenerte fresco y en control de tu presión. Mantente hidratado durante el día, y si piensas que ya has bebido suficiente agua, ¡dale otro sorbo! La deshidratación puede hacer que tu presión arterial suba, así que asegúrate de tener siempre tu botella a mano.
Para el consumo de agua en verano es recomendable seguir ciertos consejos:
– El agua es la mejor opción para mantenerse hidratado. Lleva contigo una botella de agua reutilizable y bebe regularmente a lo largo del día.
– Añade sabor de forma saludable: Si el agua sola no es lo tuyo, añade rodajas de frutas como limón, pepino o menta para darle un toque de sabor fresco sin calorías adicionales.
– Establece horarios para beber agua, como hacerlo al despertar, antes de las comidas y antes de acostarte. Esto te ayudará a mantener un flujo constante de hidratación.
– Evita bebidas azucaradas: Limita el consumo de bebidas azucaradas, ya que pueden contribuir a la deshidratación. Opta por alternativas más saludables como té sin azúcar o agua con gas.
– Come alimentos hidratantes: Incluye en tu dieta alimentos ricos en agua, como sandía, pepino, melón y ensaladas frescas. Estos alimentos no solo son deliciosos, sino que también contribuyen a tu ingesta total de líquidos.
– Conoce tus necesidades: La cantidad de agua que necesitas puede variar según factores como tu peso, nivel de actividad y clima. Escucha a tu cuerpo y bebe cuando sientas sed.
– Cuidado con el alcohol y la cafeína: El alcohol y la cafeína pueden tener efectos deshidratantes. Si consumes estas bebidas, asegúrate de equilibrarlas con una ingesta adecuada de agua.
– Si planeas hacer ejercicio al aire libre, toma agua antes de comenzar. Lleva contigo una botella y bebe regularmente durante el ejercicio.
– Atención a los síntomas de deshidratación: Mareos, boca seca, orina oscura y dolor de cabeza son signos de deshidratación. Si experimentas alguno de estos síntomas, aumenta tu consumo de líquidos.
– Adapta tu ingesta a la actividad: Si participas en actividades físicas intensas o pasas mucho tiempo al aire libre, aumenta tu ingesta de líquidos para compensar la pérdida de agua a través del sudor.
Recuerda que cada persona es diferente, así que ajusta tu ingesta de líquidos según tus necesidades individuales. ¡Mantente fresco y bien hidratado!
Además del consumo de agua es importante seguir otros consejos. ¿Recuerdas la sombra? ¡Es tu mejor amiga en estos días de verano! No te conviertas en tostada humana al sol. Busca refugio bajo un buen árbol o utiliza esa gorra que has estado guardando en el closet. Protegerte del sol no solo te ayuda a mantenerte fresco, sino que también puede ayudar a mantener a raya la presión arterial.
¡Cuidado con el sodio! Menos sal en tus comidas significa menos estrés para tu corazón. Apuesta por frutas y verduras ricas en potasio para darle un impulso saludable a tu dieta.
Si eres de los que tienen un plan de tratamiento para la hipertensión, no lo dejes de lado. Tómate esos chequeos médicos como si fueran el mejor programa de televisión. Mantén tus medicamentos al día y sigue las indicaciones de tu médico. ¡No te saltes los episodios de tu serie de cuidado cardiovascular!
En caso de que sientas algo raro, como mareos o un dolorcito extraño en el pecho, no te hagas el héroe. Busca ayuda médica de inmediato. ¡mejor prevenir que lamentar!
En resumen, el calor y la hipertensión pueden ser una combinación desafiante, pero con estos consejos relajados, ¡puedes mantener la calma y disfrutar del verano sin preocupaciones! Cuida tu corazón, y que el calor no te quite la buena onda de disfrutar este verano