Kevin Torres, un exitoso chef de 28 años, regresa al Liceo Politécnico donde estudió para enseñar cocina, demostrando que el camino del éxito viene marcado por la dedicación y la superación personal.
Por: Andrea Larrosa
¿Qué camino lleva a un estudiante a convertirse en un maestro? Para Kevin Torres, de 28 años, la respuesta se encuentra en su propio recorrido de superación y dedicación. Originario del Liceo Politécnico de La Florida, este joven chef ha alcanzado el éxito en el mundo de la cocina y ahora regresa a su alma mater como profesor, llevando consigo una historia inspiradora de perseverancia y logros.
Nacido y criado en la comuna de La Florida, Kevin Torres se destacó desde temprana edad por su pasión por la gastronomía. Tras graduarse del Liceo Politécnico, se embarcó en una carrera culinaria que lo llevó a trabajar en prestigiosos restaurantes y a ser reconocido como un talento emergente en el mundo de la cocina. Sin embargo, a pesar de su éxito profesional, nunca olvidó sus raíces ni la importancia de la educación en su camino hacia el éxito. Ahora, con 28 años y una sólida carrera en la gastronomía, Kevin Torres regresa al lugar donde todo comenzó: el Liceo Politécnico. Pero esta vez, no como estudiante, sino como profesor.
Su objetivo: inspirar y guiar a las nuevas generaciones de estudiantes, compartiendo su experiencia y conocimientos para que también puedan alcanzar sus sueños. En una entrevista exclusiva, Kevin Torres comparte su emocionante historia de superación y su visión para el futuro de la educación en gastronomía.
¿Cómo fue tu experiencia en el Liceo Politécnico?
Fue una experiencia con altos y bajos por la edad que uno tiene. Pero me permitió ir descubriendo el mundo, descubriendo lo que quieres hacer y me puede dar cuenta de las distintas realidades que hay y del calor humano que brindan los auxiliares y todos los que trabajan acá para poder sacar adelante este proyecto educativo tan lindo.
¿Qué experiencias atesoras en lo humano y en lo profesional?
En lo humano, atesoro mucho a los amigos que puede hacer, personas con las que hasta el día de hoy mantengo el contacto, que fueron muy resilientes, para poder salir adelante también durante el estudio acá en el Liceo y después en cómo enfrentaron la vida. Eso me ayudó mucho también a mí como ejemplo para poder tener una visión de cómo era la vida, de cuál es la meta y cómo, a pesar de las adversidades, había que esforzarse para poder salir adelante y lograrlo. El haber pasado por el Liceo y comenzar Mi estudio en gastronomía fue el primer paso el impulso para poder hacer realidad mi sueño y ser un gran chef.
¿Cómo te sientes de cerrar el círculo hoy entregando tus conocimientos en el liceo a nuevas generaciones?
Estoy demasiado feliz y contento de estar acá en el Liceo y poder transmitir toda mi experiencia, todos mis estudios a los jóvenes que a lo mejor o al igual que yo, están en la situación de que les gusta y que tiene una ilusión, un sueño con la gastronomía. Creo que es una muy buena oportunidad para que los jóvenes puedan salir adelante y puedan cumplir su sueño a través de esto.
Quiero ser una inspiración para ellos, para que para que se den cuenta que sí se puede a pesar de la adversidad de los problemas a lo mejor hasta económicos… sí, se puede salir adelante
