Hay una frase en materia educativa que sin duda refleja la importancia de la veta artística y cómo los jóvenes pueden ampliar sus conocimientos a otros contextos y situaciones. En rigor, se trata de que “cuando una persona entiende cómo funciona la música, entiende como se comunican los instrumentos”.
Esto es lo que día a día se vive en el Colegio Artístico Sol del Illimani y que el pasado 6 de octubre tuvo como protagonista a un destacado pianista chileno de Jazz llamado Benjamín Furman. En la oportunidad, el músico interpretó “Infancia” de su álbum, “Desde el Jardín” y “De la soledad al amor” de su nuevo EP que se lanzará el 11 de octubre y que llevará por nombre “Luz de la Mañana”.
Este compositor y cantante nacido en Santiago en 1991, comenzó con su pasión a los cuatro años y dijo “presente” en este recinto de La Florida que ya ha hecho historia por su metodología de aprendizaje. En la práctica, el “jazzista” llegó hasta el Sol del Illimani para conversar con los estudiantes y transmitirles su experiencia.
El pianista de 25 años, actualmente vive en Brooklyn, Nueva York, donde se presenta en diversas instancias semanalmente, colaborando con grandes e inspiradores músicos, consigna su sitio web http://www.benjaminfurman.com/es.
Por eso, su visita a Chile cobró especial relevancia, ya que “cada vez más se comprueba que la diversidad de artistas y personalidades están favoreciendo a que los niños aprendan a tomar atención, admirar y tratar de conectarse con otras personas. Fue muy cercano a los jóvenes”, valoró la directora del Colegio Sol del Illimani, Cristina Hidalgo, quien agregó que “estuvo en la biblioteca, donde hicimos un encuentro más íntimo, lo que le permitió transmitir sus experiencias”.
La alta autoridad de este establecimiento, contó que Furman se dio el tiempo de relatar cómo llegó a EE.UU., y qué lo impulsó a viajar a otra tierra para demostrar su talento.
“Hubo preguntas de alumnos de manera espontánea, como si alguna vez tuvo intención de dejar la música, qué compone primero, si la música o la letra. Ese tipo de preguntas te hacen entender que los chiquillos se interesan y que si bien no es la música que les podría interesar a esta edad, igualmente están abriendo los oídos”, explicó Cristina Hidalgo.
Una oportunidad única para los jóvenes
“Fue una experiencia muy linda ir al colegio y los estudiantes se quedaron con algunos conceptos que no habían escuchado antes, como es el proceso de componer una canción y les mostré las diferentes etapas del proceso creativo”. Con esta sencillez, el pianista Benjamín Furman, grafica el paso por el reciento floridano, quien complementó que “ellos (los jóvenes) estaban muy abiertos a escuchar estilos nuevos sobre el arte y la música. Fueron muy respetuosos y tenían muchas preguntas e inquietudes”.